Aprender Salud
Hipertensión Arterial: pequeños cambios hacen la diferencia
Si bien buscamos una cifra ideal, cada mínimo descenso de la presión tiene un impacto positivo en la salud.
La hipertensión arterial y sus complicaciones, el accidente cerebrovascular, la insuficiencia cardíaca, el infarto de miocardio y la insuficiencia renal crónica, permanecen como uno de los problemas más comunes y devastadores de la salud en el mundo. Sin embargo, el solo hecho de reducir la presión arterial en apenas 5 mmHg de la presión diastólica y/o 10 mmHg de la sistólica, disminuye el riesgo de padecer eventos vasculocerebrales (parálisis de medio cuerpo, dificultades en el habla) y de sufrir eventos coronarios (angina de pecho e infartos). Se suele aconsejar a los pacientes hipertensos sobre hábitos saludables, pero estos consejos no resultan siempre eficientes porque a veces se pone mayor énfasis en el control de la presión arterial a través del tratamiento farmacológico.
Hay muchos modos de bajar la presión arterial
La disminución del consumo de sal común (visible e invisible) en la alimentación cotidiana se asocia a una reducción de la presión arterial de 2-8 mmHg. Por otra parte, se recomienda una alimentación rica en frutas, vegetales, fibras, potasio, calcio y magnesio, baja en grasas y moderadamente alta en proteínas, lo cual se asocia con una reducción de la presión arterial aún mayor.
En las personas con sobrepeso y aumento de la presión arterial, un descenso de peso de 4-5 kg. intensifica el efecto antihipertensivo de los medicamentos y mejora los otros factores de riesgo cardiovascular.
Es interesante considerar que la presión arterial disminuye antes de lograr el peso ideal y aún más, con cualquier reducción de peso. Se calcula que por cada kilo que el paciente pierde, la presión arterial disminuirá entre 1,6 a 1,1 mmHg.
El ejercicio físico regular disminuye la presión arterial y el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular, así como sus complicaciones. Se recomienda una actividad aeróbica de 30-45 minutos
por día, la mayoría de los días de la semana, en forma gradual y progresiva.
La hipertensión arterial puede prevenirse
Las modificaciones del estilo de vida son beneficiosas tanto en los pacientes que tienen la presión arterial normal como en los que tienen hipertensión arterial. La combinación del control del peso y el incremento del ejercicio físico, junto con la eliminación de hábitos tóxicos como el tabaco y el alcohol, pueden retrasar hasta varios años el desarrollo de hipertensión arterial y diabetes en personas predispuestas, como quienes presentan antecedentes familiares para hipertensión arterial, diabetes y muerte prematura (antes de los 45 años) por enfermedad cardiovascular.
Un poquito puede significar mucho
Deseamos subrayar que así como el riesgo cardiovascular aumenta paulatinamente con el aumento de la presión, también está demostrado que el descenso de la presión arterial en sujetos hipertensos, por más pequeño que sea, también implicará un descenso en la posibilidad de padecer una complicación a causa de los factores de riesgo cardiovascular.
¿Cómo puede ayudarlo su médico a prevenir el ACV?
- Controlando la hipertensión arterial.
- Controlando la diabetes.
- Previniendo la enfermedad cardíaca.
- Controlando los trastornos de los lípidos (colesterol, triglicéridos).
- Usando correctamente la anticoagulación.
- Ayudándolo a dejar el tabaco.
-
Esta nota pertenece a la edición número 10 de la revista Aprender Salud.