Aprender Salud
No llores por mí, conjuntivitis
Afecta a chicos y grandes. En esta nota, acciones útiles para evitar el contagio y recomendaciones para cuidar los ojos en el verano.
Llega el calor y hay ciertas precauciones que, año tras año, son de mucha utilidad para prevenir. En el caso de la conjuntivitis, el Hospital destaca la importancia del lavado de manos frecuente como medida de prevención para evitar contagiarse de otros o -en el caso de padecerla- evitar transmitirla.
5 acciones para prevenir el contagio
Provistas por el Servicio de Oftalmología.
1.- Lave sus manos de forma frecuente con agua y jabón, o en su defecto con solución alcohólica.
2.- Evite el contacto directo con personas con conjuntivitis y no comparta artículos como: almohadas, paños, toallas, gotas para los ojos, cosméticos y anteojos.
3.- Refuerce la higiene de sus manos si está en contacto con una persona infectada o con objetos que haya tocado.
4.- No se toque los ojos ni el rostro con las manos sin lavar.
5.- Higienice sus manos antes de manipular las lentes de contacto.
Compartimos un fragmento sobre el tema publicado en “El libro azulado”. Los autores son los Dres. Paula Carrete, Esteban Rubinstein y Miguel Zárate, del Servicio de Medicina Familiar y Comunitaria. Adquiera este y otros títulos en los stands de venta en el Hospital.
¿Qué es? La conjuntivitis es una inflamación de la membrana transparente que recubre el ojo (conjuntiva). Es muy frecuente (la mayoría de las personas la han tenido alguna vez). El ojo se pone rojo, habitualmente pica, molesta y puede haber también lagrimeo y secreción (una mucosidad que puede dejar al ojo como pegado, sobre todo por la mañana).
¿Cuáles son sus causas? La más frecuente es infecciosa, ya sea debido a un virus o a una bacteria. Ambas son muy contagiosas, tanto a través del contacto directo con una persona con conjuntivitis o por compartir algún objeto (toalla, sábana, almohada). Otra causa menos frecuente es la alergia o irritantes como el jabón, el cloro, el humo o el maquillaje. En la práctica suele ser difícil determinar la causa, incluso para los médicos.
¿Cómo se trata? Generalmente, la conjuntivitis infecciosa se cura sola pero el tiempo que tarda en curarse puede ser de dos a catorce días. Si es irritante o alérgica, se resuelve cuando el irritante desaparece. En la mayoría de los casos, tal vez la conducta más adecuada para aliviar la molestia sea aplicar un baño ocular con té frío, dos a tres veces por día y esperar a que la inflamación ceda sola (se moja un algodón en té frío previamente hervido y se lo deja unos diez minutos sobre el ojo afectado).
Si el cuadro no mejora en dos o tres días. Vale la pena consultar y generalmente el médico indica un colirio o ungüento con antibióticos y, a veces (si hay mucha inflamación), uno también con corticoides para que el cuadro sea un poco menos molesto y dure menos tiempo.
Si hay alteración de la visión, si ambos ojos están muy congestionados o si hay dolor. Es recomendable consultar de forma urgente al médico (en lo posible a una guardia que cuente con oftalmólogo). También si se trata de un lactante menor de 28 días.
Otros cuidados de los ojos, especialmente en verano
Recomendaciones de utilidad, provistas por la Dra. Betty Arteaga del Servicio de Oftalmología.
>Para protegerse del sol, anteojos con filtro 100% UV ¿Sabía qué no hay una relación directa entre el tono del cristal y el grado de protección? Es decir, no significa que cuanto más oscuro sea el vidrio, más nos protegerá. Existen anteojos transparentes que tienen filtros ultravioletas y otros especiales para enfermedades específicas. Más allá de la moda, es mejor uno con un formato de armazón que envuelva toda el área de los ojos. Por ello es importante comprar los anteojos en ópticas de confianza previa consulta con el oftalmólogo.
>Los ojos y el agua. Para evitar la irritación en la pileta o en la playa es recomendable el uso de lentes de agua o antiparras protectoras ¿Usa lentes de contacto? Habrá que sacarlos antes de entrar a la pileta porque los microorganismos podrían adherirse y producir una infección en la córnea. Tampoco es conveniente usarlas en el mar: el viento, la arena, el sol y los lentes de contacto son una mala combinación.
>Cuidando los ojos, también en casa. El uso prolongado del aire acondicionado y del ventilador induce al llamado “síndrome del ojo seco” que provoca visión borrosa, picazón o sensación de quemazón. Es recomendable mantener una temperatura entre 21 a 25 grados al programar el equipo.
-
El libro azulado. Los autores se propusieron ubicarse en ese momento en el que un individuo (o una familia) debe tomar decisiones, como concurrir a una guardia, solicitar un turno con un médico, preguntarle a un vecino, familiar o amigo, buscar diagnósticos, consejos y eventuales tratamientos en Internet, o bien no hacer nada y esperar a que el problema se resuelva solo. No ha sido una tarea sencilla, pero los autores han hecho el intento y he aquí, finalmente, este libro, que esperamos pueda ser útil para ayudar a los lectores/usuarios a sentirse menos solos en estas circunstancias. Podés adquirirlo haciendo clic en la portada.