Una mirada a la salud digital en Ecuador >
"Una mirada a la salud digital en Ecuador"
Mg. Javier Orellana

Ecuador es un país lleno de contrastes naturales, con cuatro regiones claramente identificadas y una biodiversidad que lo hacen el más mega diverso del mundo por kilómetro cuadrado. A esta característica se le suman su variedad cultural, social y económica, por lo que llegar con políticas y ejecutar acciones de salud que protejan a todos sus habitantes representa un gran desafío que ha iniciado su camino. 

Comenzamos por la salud pública, cuya actualidad muestra un escenario complejo, debido a los cambios políticos muy acelerados a nivel macro, lo que no permite implementar una política a mediano y largo plazo, donde se requiere de una sólida institucionalidad y una gran inversión, para tener un equilibrio entre las necesidades de la población y la capacidad que tiene el estado de proveer todo tipo de equipamiento, medicinas, infraestructura física, digital y en especial de un conglomerado humano, profesional, que atienda y mejore el bienestar en la población que aporta continuamente a la seguridad social. Hasta el 2023, Ecuador cerró con una población de 16.938.986 de personas.

El panorama antes descrito, también tiene su componente institucional, el Ministerio de Salud Pública realizó el Plan Decenal de Salud 2022 – 2031, como un instrumento para los próximos 10 años y se creó la Agenda Digital de Salud 2023 – 2027, que "tiene la finalidad de integrar y mejorar la calidad y consistencia de la información, a través de la implementación de herramientas digitales para el análisis y generación del conocimiento". Su aplicación responde principalmente a la necesidad de crear una Historia Clínica Electrónica Interoperable (HCE), que integre y permita interactuar a los tres componentes esenciales para su ejecución: personas, procesos y tecnología. Esto es necesario resaltar, ya que, por primera vez en la legislación ecuatoriana, se indica a los tres grandes actores en la atención médica y todo esto es muy relevante, por eso, se espera que el actual gobierno potencie y de continuidad a lo ya establecido en el periodo anterior.

Al momento de analizar la salud digital es necesario presentar algunos índices como la cobertura del internet que llega a un 76% de la población y que el país cuenta con 13.6 millones de dispositivos móviles (celulares) según el Ministerio de Telecomunicaciones 2023. Sin embargo, también existe una brecha digital, que alcanza un 86.97% de concentración de la red móvil en 12 de las 24 provincias del país y aún sigue siendo un tema estructural y rígido la enseñanza de tecnologías como la inteligencia artificial, analítica de datos o si aterrizamos en salud, la alfabetización digital juega un rol fundamental, en centros públicos y privados de tercer y cuarto nivel, donde se educan los futuros profesionales. Esta área tiene ya sus primeros pasos, pero falta potenciar y agilizar la enseñanza de cátedras para mejorar el conocimiento, y es aquí cuando aparecen organizaciones no gubernamentales (ONGs) que impulsan la salud digital, como es el caso del CEDIA.

La Corporación Ecuatoriana para el Desarrollo de Investigación y Academia (CEDIA) viene a ser un catalizador de procesos muy importantes, apoyando la gestión del Ministerio de Salud Pública y de la Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (SENESCYT). Resulta clave para fortalecer programas como la “Propuesta de una nueva malla curricular para renovar la oferta educativa en áreas de Salud Digital", un paso fundamental para que exista los parámetros o lineamientos que marquen la cancha dentro de esta temática a nivel país, y que todos los involucrados en el sector académico tengan parámetros que permitan guiar los pasos para estandarizar las líneas de acción.

En lo privado, hay un claro desarrollo y fortalecimiento con nuevas y modernas infraestructuras, se mejoran los complejos hospitalarios y las startups que innovan constantemente, son el complemento para el desarrollo de tecnologías que giran en torno al paciente, aunque está pendiente, crear un organismo independiente que regule y verifique la calidad de los servicios, detalle no menor en un país donde no hay ley o entidad que verifique la calidad y el cumplimiento en temas como ciberseguridad, data, equipos  de monitoreo remoto, software clínico, entre otros. 

Algunos aportes importantes como contar con la Ley de Fintech (La Ley Orgánica para el Desarrollo, Regulación y Control de los servicios financieros tecnológicos), y todo esto es parte de un esquema para establecer mejor el mecanismo de cómo funciona un ecosistema nacional en sus diferentes áreas, y donde la salud digital, es un protagonista trascendental.

La gestión es otro pilar clave. Ya está la iniciativa de interoperabilidad médica, HL7 Ecuador, que se lanzó el pasado 2 de marzo, en la ciudad de Quito y fue el punto de partida para generar una base que sea un paraguas, para debatir y progresivamente implementar un proceso de interoperabilidad bajo un estándar internacional. La tarea de todos los actores será muy extensa, pero tendrá como meta, atender de mejor manera a los pacientes, optimizar recursos y que Ecuador esté bajo un estándar mundial.

Sobre el punto anterior, es importante indicar que hay iniciativas para comenzar a conectar datos, esto ya es un avance, tomando en cuenta, la dispersión de la información y que la interoperabilidad es algo aún desconocido para la mayoría de los sectores involucrados en el proceso. A partir de esta iniciativa, más lo realizado por el Ministerio de Salud Pública, se puede y debe articular espacios para debatir sobre la historia clínica, inteligencia artificial en salud y estar al tono con el crecimiento y rapidez de la época. La era de la digitalización de la salud es un aliado clave en nuestra sociedad.

Otro detalle importante es que Ecuador, es muy poco conocido en el mapa de eventos en salud digital, y esto es un reto para todos quienes aportamos en su crecimiento, por lo que uno de los objetivos es tener al menos una convocatoria de relevancia internacional en este año, para afianzar más las relaciones del país, como un destino para encuentros en salud digital.

Finalmente, el ecosistema de salud digital ecuatoriano está en una fase 3/5 según el Global Digital Health Monitor (GDHM) 2023. Sin embargo, esto es solo un paso más para determinar el grado de madurez digital. A su vez, es destacable también que la ciudad de Cuenca, la tercera más importante del país, obtenga 78,9% en el ranking Health Care Index 2023. En esta clasificación se evalúa la calidad del sistema de salud, los profesionales de la salud, el costo, equipamiento, personal y acceso a medicamentos de alta calidad. Esto es un buen pronóstico de una ciudad que desde hace décadas privilegia la planificación, sostenibilidad y al ser humano como el eje del desarrollo, por eso, puede ser considerada la ciudad sostenible e inteligente del Ecuador, a tal punto que Cuenca, fue seleccionada para ser sede del Smart City 2023.