La única constante es la transformación >
"La única constante es la transformación"
Lic. María Gabriela Almeda Rodríguez

La salud digital en Venezuela presenta una serie de desafíos y oportunidades, entre los que se destaca la importancia de la colaboración entre el sector público, privado y académico para superar la brecha digital y garantizar el acceso a una atención médica de calidad para todos los ciudadanos.

Venezuela ha demostrado una notable resistencia ante los avances tecnológicos, desafiando las probabilidades para que sus organismos adopten e implementen mecanismos digitales, a pesar de enfrentar una significativa brecha digital que la ubica en el puesto 140 del ranking mundial de velocidad de internet. Esta situación revela la precariedad del servicio, complicando aún más la gestión de procesos en salud digital, con una relación entre servicio y calidad que se traduce en precios bajos, velocidades lentas e intermitentes. Para mejorar la infraestructura de comunicaciones, es esencial crear mejores rutas de conectividad, tarea que actualmente solo los proveedores de empresas privadas pueden abordar, ofreciendo conexiones más estables y rápidas.

El efecto pandémico llevó socialmente a instaurar en el sector empresarial aplicaciones tecnológicas de forma gradual sumando a una evolución tecnológica que permite prestar servicios digitales como la banca en línea, pago móvil, aplicaciones delivery, impulsando el desarrollo del sector rumbo a la digitalización en el país. 

Según reza en la web del ministerio de Ciencia y Tecnología, Venezuela cuenta con “un programa nacional de transformación digital que promueve plataformas desarrolladas en software libre, con estándares abiertos, que nos permitan la mayor inclusión posible”.

Expertos en la materia consideran que, a nivel de América Latina, el índice de desarrollo del ecosistema digital va en niveles medios e in crescendo. 

Ahora bien, hoy en día, el país cuenta con una población que asciende a los 28.44 millones de habitantes, con un 88,3% residiendo en áreas urbanizadas, donde el acceso a una conexión a internet estable es más accesible. Hay 22.73 millones de dispositivos móviles en uso, incluyendo celulares, tablets y computadoras personales, aunque solo 20.57 millones de estos aparatos pueden conectarse de manera continua a internet. Esta situación se refleja en la presencia digital del país, con solo 14 millones de perfiles activos en las redes sociales más populares del mundo, lo que equivale a casi la mitad del total de residentes.

En base a esta población y un grupo nutrido de especialistas médicos, alrededor de 56.221,  la relación que se da es 1 médico cada 475 pacientes que buscan atención médica. Esto marca un ritmo para que la interoperabilidad médica, la inteligencia artificial y el uso de sistemas en la nube puedan fusionarse y crear una agenda en salud digital que de paso a la optimización de procesos en la asistencia médica.

Por otro lado, otro punto no menos importante es que los proveedores estén debidamente certificados o validados como software clínico con capacidad para prestación de servicios médicos que ofrezcan soluciones tecnológicas de calidad. Estos procesos aún son básicos e iniciales, por lo tanto, todavía no hay una legislación específica para la salud digital, ni normas técnicas. Sí, se prevé una implementación, pero el proceso es aún lento. 

Desde la mirada privada, Thani Medical Software ha abordado los problemas como la falta de herramientas digitales médicas que exigen estos tiempos para ampliar y mejorar servicios que lideren el proceso de la salud digital en Venezuela. La plataforma cuenta con una experiencia de siete años en el mercado y viene a ser una solución y asistencia a los usuarios en nuestro país. 

Otro aspecto relevante es el cumplimiento con La Ley de Protección de Datos, desarrollar áreas como la lectura del análisis en indicadores de salud, estadísticos y gráficos la integración de dispositivos médicos inteligentes, la interoperabilidad entre sistemas de salud, la seguridad de datos y la protección de la privacidad de los pacientes basada en tecnologías de seguridad avanzadas, como la encriptación de datos de alta calidad. Esta encriptación, que forma parte de las tecnologías de seguridad utilizadas por aplicaciones bancarias, son ideales aplicar en cada etapa de los procesos para asegurar la protección continua de la información.

En paralelo a este escenario, Venezuela ha crecido demográficamente, arrojando como resultado la creación de más usuarios, lo que indica un buen pronóstico para los canales de telemedicina y atención remota que permiten que los pacientes reciban atención médica sin necesidad de desplazarse físicamente al consultorio. El desafío inmediato sería proporcionar acceso a toda esa información desde cualquier dispositivo con conexión a internet y en el momento que sea necesario. Además, es clave comenzar a implementar la utilización de tecnologías como la inteligencia artificial, el aprendizaje automático y la minería de datos, para la realización de diagnósticos más precisos y en la formulación de recomendaciones más personalizadas para el empoderamiento del paciente.

Finalmente, se trata de promover la alfabetización digital, como herramienta de educación que brinde información médica actualizada dirigida a personas interesadas en el cuidado de la salud, incluyendo usuarios regulares, estudiantes y profesionales médicos, puede potenciar la digitalización económica del sector salud en el país.