
Tanto la IA como la HPC están transformando el sector salud. Con el impulso del 5G y los sensores del Internet de las Cosas, se abre paso una nueva era de datos y análisis que permitirá una medicina más precisa, ágil y personalizada.
Gracias a su democratización, hoy organizaciones de cualquier tamaño y sector pueden ganar una ventaja competitiva al aprovechar el poder de los datos. El enfoque modular de soluciones listas para implementar aporta velocidad y flexibilidad, permitiendo una configuración rápida y escalabilidad sencilla. Con esta perspectiva, el sector salud se encamina a volverse completamente data-driven y estar mejor preparado para ofrecer respuestas personalizadas.
El big data impulsa grandes avances en salud
Las organizaciones dedicadas a las ciencias de la vida y a la investigación médica –especialmente en genómica y medicina de precisión– están aplicando IA de formas notables, gracias a modelos de machine learning entrenados con datos de experimentos previos. Estudiar nuestro diseño genético les permite a los investigadores abordar cada caso médico con una precisión extraordinaria. Así, pueden personalizar tratamientos para indicar los medicamentos más efectivos y, al mismo tiempo, evitar efectos secundarios.
El Instituto de Investigación Genómica Traslacional (TGen), por ejemplo, utiliza estas tecnologías para transformar descubrimientos sobre enfermedades en tratamientos concretos para pacientes. Este trabajo requiere manipular enormes volúmenes de datos: moverlos, protegerlos, gestionarlos y procesarlos rápidamente, sobre todo porque la velocidad es crítica en la lucha contra enfermedades raras. Gracias al enfoque modular con la solución Dell EMC Ready para Genómica en HPC, el equipo de TGen logró reducir el tiempo de secuenciación del genoma de dos semanas a menos de ocho horas. Y cuanto más rápido los investigadores pueden procesar esos volúmenes masivos de información, más rápido pueden tratar a quienes lo necesitan.
La secuenciación genómica acelerada también tuvo un fuerte impacto en la participación de TGen en la lucha global contra el COVID-19. Los virus tienen un mapa genético, como cualquier otro organismo vivo, y el conocimiento obtenido mediante este enfoque de "bloques de construcción" permitió comprender más rápido las subvariantes del SARS-CoV-2, su nivel de contagio y modelar cómo se propaga en una población.
Además, los dispositivos inteligentes personales implican más datos disponibles para generar conocimiento en salud. En los próximos cinco a diez años, contribuirán a mejorar la salud gracias a la monitorización desde el borde de la red (edge) y respuestas médicas más rápidas. Como ya estamos acostumbrados a utilizar estos gadgets que registran nuestra actividad física, interpretar esos datos con IA y HPC ayudará a detectar problemas de salud de forma temprana y a definir el tratamiento más adecuado. Imaginemos un momento en el que una persona pueda comprender su estado de salud con precisión antes siquiera de consultar a un médico.
Tecnología en pos del bienestar humano
A medida que el acceso a estas herramientas se vuelve parte del día a día en la investigación médica, veremos cada vez más organizaciones aprovechar sus beneficios al integrarlas a su infraestructura. Se espera que el mercado siga creciendo con la convergencia de soluciones y también observaremos cómo el uso de unidades de procesamiento gráfico (GPU) continuará impulsando la IA, abriendo el camino hacia una nueva generación de Unidades de Procesamiento Inteligente (IPU), lo que contribuirá a acelerar aún más el papel de los datos en todas las industrias. Y, si bien adoptar nuevas formas de trabajo puede parecer desafiante, los proveedores de tecnología están bien posicionados para ayudar a las organizaciones a transitar este nuevo panorama.
La investigación médica ya ha alcanzado grandes logros gracias a la IA y la HPC. Al automatizar el análisis de datos básicos, se libera a los profesionales para que se enfoquen en los aspectos más complejos de la investigación y el descubrimiento. En el campo de la salud, la HPC será una herramienta clave en la lucha contra enfermedades raras, allanando el camino hacia una nueva era de medicina preventiva.