En la exhibición de la Biblioteca de Ciencias de la Salud  de la Universidad de Virginia sobre herbarios pertenecientes a su colección de libros raros, se incluye información sobre John Gerard (1545-1611)  que fue uno de los más respetados expertos en plantas de su época. Se desempeñó como superintendente de los jardines de William Cecil, consejero de la Reina Elizabeth de Inglaterra. Sin embargo, no fue el primer autor del famoso herbario que citamos aquí. Con excepción de los agregados de plantas de su propio jardín y otras de origen norteamericano, el libro es una traducción al inglés de la obra de Rembert Dodoen, un académico holandés que realizó un  popular herbario en 1554. En 1633, un apotecario llamado Thomas Johnson corrigió y amplió el herbario de Gerard. La ilustración del aloe está tomada de la edición de 1633, que se encuentra en la Wilhelm Moll Rare Book and Medical History Room de la Claude Moore Health Sciences Library.

Gerard recomienda el jugo de aloe como purgante y vermífugo: “cuando todas las medicinas purgantes son perniciosas para el estómago, el aloe resulta confortable”. Agrega que es bueno para contrarrestar el mal aliento que viene del estómago cuando hay una mala digestión, para las hemorroides y, en pequeñas cantidades, para limpiar las heridas y aplicar en zonas doloridas.  También lo recomienda para los ojos, ya que permite lavarlos sin causar ardor.

El aloe es una planta originaria de África oriental y meridional, que también fue introducida en las “Indias occidentales” donde ha sido extensamente cultivada. Además crece en los países que bordean el Mediterráneo. Comprende más de 200 especies, llega a medir entre 2 y 3 metros de altura y sus hojas son grandes y carnosas, con espinas en el borde. Tiene una flor que crece en el centro de la planta, de color rojizo y amarillento.

La que se utiliza con fines médicos es el producto del líquido que exuda el corte transversal de las hojas una vez que se ha secado. La fama del aloe está cimentada en el poder regenerador que tiene para las heridas, lesiones, quemaduras y otras afecciones de la piel. También en forma bebible, el jugo se emplea para la indigestión y los gases.

En el siglo I d.C. Dioscórides, en su herbario griego, hace una amplia descripción de la
planta por sus propiedades medicinales y cosméticas. En España la planta fue introducida por los árabes.

En la Web:

Botanical.com

http://www.botanical.com/botanical/mgmh/a/aloes027.html

[Consulta: 04/09/07]

Géminis: Papeles de salud

http://www.herbogeminis.com/propiedades_y.html

[Consulta: 04/09/07]

University of Virginia. Healthsystem Library

http://www.healthsystem.virginia.edu/internet/library/historical/rare_books/herbalism/gerard.cfm

[Consulta: 04/09/07]

Wikipedia

http://es.wikipedia.org/wiki/Aloe

http://en.wikipedia.org/wiki/John_Gerard

[Consulta: 04/09/07]